Eco a un funeral

Eco a un funeral

Esta vez, ‘Al Oído… de El Monje’, hace eco de informaciones en torno a los funerales de Omar Geles… Su agradecimiento con Sayco y la férrea decisión de Hilda Suárez.

Imagen de portada: La bandera de la Sociedad de Autores y Compositores, Sayco, sobre el ataúd de Omar Geles. Entre los dolientes, el abogado Tomás Darío Gutierrez, investigador y amplio conocedor del folclor vallenato.

Al Oído…

De El Monje

Geles y Sayco

Omar Geles, según decía, no se imaginaba cómo sería la vida de miles de compositores sin la Sociedad de Autores y Compositores-Sayco, no existiera.

De acuerdo con el cronista Uriel Ariza-Urbina, fueron más de 400 canciones —entre más de mil de su autoría— las que el acordeonero y compositor registró en Sayco, con la convicción de que sus derechos de autor no solo estaban debidamente protegidos, sino que él sería justamente retribuido por el uso de su música.

Sin tapujos, Geles decía que le agradecía a Dios por “el talento que me dio para la música y también porque existe Sayco”.

Geles, siempre agradecido con Sayco.

Para Sayco, Geles era un socio muy especial.

Por regalías, con tantos éxitos grabados por exitosos cantantes, muy importantes son los recaudos a favor del hijo de Mahates, Bolívar, que creció y se hizo en Valledupar.

Nadie podía oponerse a que sobre el ataúd de Omar Geles durante sus funerales se colocara la bandera de Sayco y en la despedida al prolífico autor resplandeció ese simbolo de Sayco.

En el momento preciso, gran homenaje a la memoria de quien, el jueves 23 de mayo, fue sepultado en el cementerio ‘Jardines del Ecce Homo’ en la capital del Cesar.

«Ella fue quien quiso»

Se comunican con El Monje un par de colegas amigas vallenatas para precisarle que nadie obligó a doña Hilda Suárez a estar presente en la mayoría de los eventos que se cumplieron con motivo de los funerales de su hijo Omar Antonio Geles Suárez.

Motu proprio, doña Hilda cantó apartes de su canción ‘Los caminos de la vida’

“Ella no iba a quedarse en casa mientras a su hijo fallecido lo velaban y sepultaban y por eso, bajo prescripción médica y la ayuda de calmantes emocionales recetados y supervisados por profesionales de la salud, estuvo en casi todos los actos fúnebres”, dijeron. “Ella no podía estar ausente”, anotan las colegas que decía doña Hilda.

Es más —agregaron—, doña Hilda, en férrea decisión, fue quien pidió que la dejaran cantar ‘Los caminos de la vida’, al tiempo que proclamaba que, aunque Omar le hubiera pedido que no le cargara luto si moría primero que ella, no le hará caso a su hijo y se vestirá de negro cerrado hasta el día en que Dios la llame para ir a acompañarlo en la Eternidad.

“No deseamos polemizar con nadie, pero esta es la verdad”, anotaron. “Nadie en el Valle acepta que el sepelio de Omar se convirtió en ‘guachafita absurda ante el dolor ajeno’. Fue un entierro a lo vallenato”, puntualizaron.

Omar Geles cuando apenas arrancaba a ser un grande del acordeón.

En medio de las precisiones que hacían las dos colegas, El Monje recordó que por estos días se ha hablado mucho de la entrevista que hace once meses le concedió Geles al sitio web Viscari, presentado por Víctor Sánchez Rincones. De ese diálogo, vale la pena retomar un aparte que, en la voz de Geles, dice: “Esa mujer ha sido el motor de mi vida musical y me ha dado tantas cosas…”.

Se refería a su madre y recordaba un triste pasaje vivido por la familia: “Cuando mi papá se va de la casa hubo momentos muy duros, mi mamá lavaba ropa ajena, a todo el que tuviera pa’pagar le lavaba la ropa, lo hacía para comer y fueron momentos que sirvieron de plataforma de lanzamiento para soñar”.

Y en ese caldo de cultivo habían de cocinarse los versos de ‘Los caminos de la vida’…

“‘Los caminos de la vida’, su canción, la canción que le dedicó su hijo, la cual, necesariamente, tenía que ser cantada por doña Hilda en el entierro de Omar, así ella, a sus 94 años, se esforzara al máximo para hacerse escuchar”, finalizaron las colegas amigas vallenatas que le pidieron a El Monje que, en aras de respetuoso colegaje, mantuviera sus nombres en reserva.

Y es que son más de 30 versiones

Son más de treinta las versiones grabadas de ‘Los caminos de la vida’, tema inspirado en la madre del compositor y las vicisitudes que padeció la familia cuando Omar Geles era niño.

Omar Geles y Alzate en una de las más de 30 versiones de ‘Los caminos de la vida’.

Se ha grabado varias veces en vallenato, pero también suena como cumbia, como pop, como música popular colombiana y como balada.

De acuerdo con ‘las 2orillas.co’, existen cuatro versiones diferentes a un vallenato que pueden ser consideradas como memorables: En cumbia, por Vicentico; en pop, por Alexander Acha —hijo del cantante Emmanuel— con Dulce María, exintegrante de RBD; en balada, por la bogotana Paula Arenas; y en música popular, la de Alzate, con acompañamiento del mismo autor de la canción.

Una interpretación en vallenato que es bien recordada es la de Jesús Manuel Estrada, que llegó a Hollywood, con la película ‘María llena eres de Gracia’.

Créditos por fotos: Gobernación del Cesar – http://sayco.org/ – https://www.las2orillas.co/