Orgiástica saturnal

Orgiástica saturnal

«Para mí amigo José Orellano y su prestigioso periódico El Muelle-Caribe, para festejar el Día del Idioma», dice el médico-poeta samario Alfonso Noguera-Aarón al conmemorarse el fallecimiento de Cervantes Saavedra.

Imagen de portada: una pintura que pudiera trasladarnos a los tres últimos versos de Orgía: «¡Que se derrumben mil torres de Babel!/ y aunque en la noche brille una sola estrella…/ ¡Que sea la Estrella bendita de Belén!»

APORTE A ESTE DÍA

¡Orgía…!

Del libro:
Flor de Zarzas
Autor:
Alfonso Noguera Aarón
Motivo:
Día del Idioma

¡Dejad que el cuerpo a la delicia vaya!
corporales humores libremente danzan…
¿Para qué frenos si la vida pronto acaba?
¡Mirad los días que como el viento pasan!
¡Dejad a Mesalina disoluta entre su circo!
¡A Safocleis escuchadla declamar en Lesbos!
¡Pigmaleón y Galatea que vivan de su hechizo!
¡Y Onán se complazca frenético a sí mismo!
¡Que Adonis y Proserpina derrochen de su infierno!
¡Envanecido Narciso muera en su espejismo!

¡Dejad que el mundo vaya a la bartola!
el Rubaiyat de la vida sin cesar se prende,
la zarabanda non natura de Sodoma…
¡En Sidón y Babilonia se enciende!
¡Que ondule el talle y la cadera…
al compás de la cítara y el vino!
¡Que se vuelque el averno sobre la tierra…
orgiástica saturnal de los siglos!
¡Que dance Salomé ante Herodes Antipas…
y se contorsionen sus lúbridas caderas… !
¡Qué importa…! si la cabeza del Bautista
brinda ya Herodías en pérfida bandeja;
¡Permitid complacidos a los harenes!
mientras la caravana de Medina venga,
¡Entregad al califa sus mujeres…!
¡Mahoma espera sórdido en la Meca!

¡Que viva Lucrecia, la Pompadour y Elena!
¡Loores a los Luises y su corte de Versalles!
¡Salve, Oh rey, Enrique Octavo y Ana Bolena!
¡Vítores a Masoch, Maquiavelo y Sades!
¡Dejad… permitid a la carne complacencia!
como al sediento, el agua lo mitiga,
necio es el verbo y vana toda ciencia
para la bestia, fornicaria envilecida;
¡Dejad que el demonio, la carne y el mundo
a tu entorno se arrebaten por doquier!
¡Que los muertos entierren a sus muertos…!
y la maldad prosiga en su querella,
¡Que se derrumben mil torres de Babel!
y aunque en la noche brille una sola estrella…
¡Que sea la Estrella bendita de Belén!

Tras una danza de la princesa Salomé ante Herodes Antipas, ella pidió la cabeza de Juan el Bautista en una bandeja y su deseo le fue concedido por quien —Herodes Antipas—  había tomado a Herodías, la esposa de su hermano Felipe, como su propia esposa. Salomé y Herodes Antipas danzan por entre los versos de Alfonso Noguera Aarón en este Día del Idioma.