Milei: ¿Ley argentina?

Milei: ¿Ley argentina?

Sitiada por una devaluación del 22%, una inflación del 130% y tres candidaturas de derecha, Argentina votará por nuevo presidente bajo la incertidumbre. Se sufragará por “bronca”, “odio” o “miedo”.

¿LA ESPERANZA?

Argentina: ‘voto incertidumbre’,
por “bronca u odio” y “miedo”

Por José Orellano

Javier Milei y su fórmula electoral Victoria Villarruel… Sergio Massa con Agustín Rossi, ministro de Economía y jefe de Gabinete, respectivamente, el oficialismo… y Patricia Bullrich con Luis Petri, las tres candidaturas a presidencia y vicepresidencia de Argentina.

Buenos Aires

Mientras en cajas de cambio, o cuevas, el dólar blue —el negro— cotiza hoy en 725 pesos argentinos, las estadísticas oficiales señalan que se requieren 99.053 de esos pesos —gastar 825 al día, 1 dólar y 14 centavos— para que una familia argentina no sea vista como en situación de indigencia.

Al tiempo, con 435.394 pesos de gastos mensuales —600 dólares con 68 centavos— se alcanza el estatus de familia clase media y con 282.452 —393 dólares con 69 centavos— una familia se ‘salva’ de quedar bajo la línea de pobreza.

En estas estadísticas también caben las familias acomodadas, las cuales requieren mínimo un ingreso mensual superior a un millón 163 mil 732 pesos —1.606 dólares con 15 centavos, el máximo de la clase media— para sostener su ritmo de vida, gente pudiente que, a la par de los dueños o directivos de empresas medianas y emporios económicos, no dejan de preocuparse por su futuro y de comenzar a sentir afectaciones frente a la devaluación oficial del 22 por ciento tras las PASO y una inflación que ya va por el 130 por ciento y apunta hacia el 200 para finales de año.

Frente a tal panorama no resulta extraño escuchar desde jubilados y jóvenes estudiantes —indigentes, pobres, clase media y acomodados— gritar con sarcasmo que “somos campeones y al menos NO gobierna la derecha”, mientras que, sin mucha sutileza, dejan escapar su deseo de que a la Casa Rosada —sede de la presidencia de Argentina— arribe esta vez el excéntrico economista ultraconservador, ex roquero y exjugador de futbol Javier Milei.

Milei, portero del equipo Chacrita. Imagen de https://tn.com.ar/deportes/

Sin progresismo opcional —no hay candidatura de izquierda—, entre la ultraderecha conservadora y más derecha: un ‘peronismo de dudosa militancia’ y el oficialismo, la campaña electoral por la presidencia se encamina hacia el día clave y en medio del debate nacional por los afanes de dolarización de la moneda argentina que impulsa Milei, ‘Clarín’ informa, con sensacional despliegue, que el líder del movimiento ‘La libertad avanza’ reside en una mansión de 2.000 dólares de alquiler —1.450.000 pesos argentinos— y “dos ambientes enteros para sus cuatro mastines ingleses que pesan alrededor de 100 kilos”.

“Le llaman ‘El loco’, pero es un loco genio”, piensa una inmensa mayoría en estos tiempos electorales y durante los cuales las conversaciones, a nivel familia, academia o ‘laburo’, giran en torno a la política, concretamente a las presidenciales del próximo 22 de octubre, siete días antes de que se realicen las regionales en Colombia.

“Es un ‘mandón’, encantador de serpientes que sabe envolver”, dicen otros de Milei, sobre quien la más reciente encuesta de CB Consultora Opinión Pública, revela un resultado que, de momento, lo pone adelante de sus dos contrincantes. Concordante con los resultados de las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias, PASO, del domingo 11 de agosto, el sondeo sitúa la imagen de Milei de ‘La libertad avanza’, por sobre las de Patricia Bullrich de ‘Juntos por el cambio’ y del ministro de Economía Sergio Massa de ‘Unión por la Patria’.

Ante la incertidumbre del elector argentino, un 43,3%… La ‘esperanza’, un 23,7%, Milei.

Según el informe de CB, que se declara “a la vanguardia internacional en encuestas de opinión”, Milei gana en 16 de los 24 territorios que componen la Argentina, mientras que Bullrich lo logra en 5 y Massa en 3. La Provincia de Buenos Aires es uno de los 3 sitios donde ganó Massa, “pero Milei se encuentra a tan solo 1,4 puntos, una diferencia casi de empate”, precisa CB.

Otra encuesta conocida en las últimas horas y realizada por Market Research CEOP, especializada en Opinión Pública, y mediante la cual se auscultó la denominada “segmentación psicográfica” con la que los argentinos votarán presidente, sobresale el que ha de ser llamado “el voto incertidumbre”.

De acuerdo con el sondeo, se concurrirá a las urnas con un estado de ánimo enmarcado por la sensación de un futuro incierto y la desconfianza, franja en la cual está sumido un 43,3 por ciento de los consultados… Apenas un 23,7 por ciento sufragará “con esperanzas”, mientras que un 19,2 por ciento lo hará con “bronca u odio” y un 12,8 por ciento con “miedo”.

En este escenario, Mlilei alcanzaría un 34 por ciento de los votos, seguido en este caso por Massa, con un 30 por ciento, y de última quedaría Bullrich, con un 24 por ciento.

Desde su estilo cargado de histrionismo, Milei sigue impulsando su iniciativa de dolarizar la economía argentina y de eliminar el Banco Central, BCRA, por cuanto —lo reitera en la novena edición del Latam Economic Forum ante figuras de la economía, las finanzas y los negocios— este “solo sirve para hacer daño. Cuando se expande genera inflación y cuando se contrae también, porque genera una recesión de manera innecesaria y destruye capital, el cual la economía debe reconstruir. En el medio se pierden fuentes de trabajo y la gente sufre”.

Barrio San Isidro, en Buenos Aires.

Según su discurso, “dolarizar es todo lo opuesto a la hiperinflación”, y anuncia que, en su momento, la dolarización va a hacerse “al precio de mercado, que hoy sería a 730” pesos argentinos. “Yo soy liberal, yo creo en el sistema de precios”, puntualiza.

Regodeado en la altisonancia que gusta en sectores populosos, el ‘libertario’ sigue yéndose lanza en ristre contra el Estado y la dirigencia política y asegura que “la inflación es un delito”, al tiempo que se declara en confusión al no poder entender que haya gente en el sector privado “aceptando que los roben con el impuesto inflacionario”. En economía como ciencia, el ‘impuesto inflacionario’ representa un aumento sostenido del gasto público que el Estado financia con más impuestos o con más deuda.

Milei fustiga a los economistas “rudimentarios” e “ignorantes” de ‘Juntos por el Cambio’ y exhorta a los argentinos a que “no se dejen engañar por estos delincuentes que toman un tipo de cambio delirante que se les ocurrió después de 5 botellas de vodka y dividen los salarios, como si fuera una cuenta de equilibrio parcial”.

En medio del debate, para analistas, economistas y hasta mentores de Milei, la dolarización implica una brutal caída de los ingresos de la población, una disparada “hacia las nubes” de la indigencia y la pobreza y una retracción del consumo y de la actividad económica. La propuesta es vista como un “salto al vacío”.

Aunque un amplio sector señala a Patricia Bullrich como una excelente opción presidencial, ella representa para otros “lo mismo de lo mismo”, un lo mismo que chuza la testa de Sergio Massa, quien desde su ministerio —el de Economía, el oficialismo— ha echado a rodar una cadena de medidas económicas en fallidos intentos por equilibrar los efectos de la devaluación y la galopante inflación, pero además con creciente rechazo. La siguiente frase, en cualquier estrato argentino, aunque se diga que en Argentina no hay estratos, lo dice todo: “Aquí todo sube, lo único que baja es el sueldo”.

«Le llaman ‘el loco’, pero “es un loco genio”», dicen sus seguidores.

Para los medios de comunicación —en su mayoría, abiertamente identificados, en repartija ‘ideológica’, con ‘Juntos por el Cambio’ y Unión por la Patria’—, la popularidad de Milei es una especie de ‘espejismo’ que no le alcanzaría para llegar, pero lo cierto es que entre los argentinos se observa un elevado cansancio ante el tradicionalismo de los modos de gobierno que parecieran eternos enemigos de quienes los eligen cada cuatro años, desde1995.

—Votaremos por Milei, por bronca, porque no queremos más de lo mismo —se escucha decir en los distintos mentideros, en los corrillos y hasta en los cotilleos. No importa con lo que se nos venga cuando ya sea presidente. Puede resultar bueno o malo, lo elegiremos para lo mejor o para lo peor, negro o blanco, sin términos medios—. Incertidumbre.

Aunque desde afuera de Argentina se piense que Javier Milei es “un fenómeno inflado por los medios de comunicación”, un análisis objetivo pudiera afirmar que no es así, que se trata de un fenómeno político surgido, crecido y fortalecido gracias al inconformismo ciudadano. Él no tiene medios, por el contrario: desde los medios, en repartija idearía entre los otros dos aspirantes, se le critica por todo. A no ser que esto se haya vuelto un búmeran y de esa forma haya ‘inflado’ a Milei como fenómeno político.

Un fenómeno político que, sin embargo, para los analistas imparciales, no ganaría directamente la presidencia el 22 de octubre, sino que tendrá que irse a balotaje o segunda vuelta, cuya eventualidad está programada para el 19 de noviembre, veintiún días ante de la posesión presidencial el 10 de diciembre, cuando Argentina celebra el Día de la Restauración de la Democracia en conmemoración de aquel día en que, en 1983, feneció la última dictadura en cabeza de Jorge Rafael Videla, y asumieron Raúl Alfonsín como presidente y los cuerpos legislativos, elegidos en las urnas.

La última dictadura —señalada por la historia como fecunda en terrorismo, asesinatos y desapariciones de cientos de personas—, que junto con otras cinco y muchísimas acciones de Perón y Evita y del peronismo subsiguiente son, en opinión de gente mayor, de jubilados con bajísima pensión, la madre de la actual situación del país, un territorio que alcanzó a ser “el granero del mundo”.

Sin piedad alguna, fustiga a sus enemigos, en especial funcionarios del Estado.

La última dictadura… la del ‘Proceso de Reorganización Nacional’, la sexta, la de Videla. Las otras cinco son la de José Félix Urbizu, la de la ‘Revolución del 43’, la de la ‘Revolución Libertadora’, la de ‘1962-63’y la de ‘Revolución argentina’.

Hoy, desde la ultraderecha, Milei se insinúa como el coco contra la derecha atornillada al poder desde la Casa Rosada, en torno a la cual se tejen muchas historias non sanctas sobre actividades sociales que en muchas noches se celebran en sus aposentos.

Para bien o para mal del pueblo argentino —un país en donde a muchos miembros de la clase política se les censura su incapacidad para hablar correctamente en su mismo idioma y su desconocimiento total del inglés, caso del presidente Alberto Fernández—, Javier Milei, quien pudiera llegar a gobernarlo y quien se autocalifica como ‘La única solución’, ostenta una hoja de vida que es una valiosa pieza que convoca a pensar detenidamente hacia una acertada selección, sobre todo en asunto de economía… Conozcámosla:

—Es licenciado en Economía de la Universidad de Belgrano.

—Realizó un posgrado en Teoría Económica en el Instituto de Desarrollo Económico y Social y un posgrado en Economía en la Universidad Torcuato DiTella.

—Ha sido economista jefe de Máxima AFJP, coordinador del Estudio Broda y Asesor del Gobierno Argentino en el CIADI.

—Actualmente, se desempeña como economista jefe de la Fundación Acordar, es miembro del B20, miembro del Grupo de Política Económica de ICC Internacional —asesor del G20 en el diseño de políticas económicas— y miembro del World Economic Forum.

Libro de la autoría del candidato, el cual cuenta la fulgurante aparición en la política argentina de quien ha captado y calibrado el descontento de la sociedad con la casta política.

—Es especialista en temas de crecimiento con y sin dinero.

—Ha sido profesor de Microeconomía, Macroeconomía, Teoría Monetaria, Teoría Financiera, Crecimiento Económico y Economía Matemática, tanto en universidades de Argentina como en el exterior.

—Es autor de más de 50 artículos académicos, cerca de un centenar de artículos periodísticos en los medios más importantes del país y autor de 6 libros destacándose entre ellos ‘Política económica contrarreloj’, ‘Lecturas de economía en tiempos del kirchnerismo’ y ‘El retorno al sendero de la decadencia argentina”.

Otra obra suya, ‘El camino del libertario’, editado por Planeta y que dice que es “un libro en tres actos en los que el protagonista de la aparición más fulgurante que se produjo en la política argentina en años cuenta el camino que lo llevó hasta su banca de diputado nacional, a captar y calibrar como nadie el descontento de la sociedad con la casta política”.

El 22 de octubre de 2023, pues, ha de llegar. Y a partir del 10 de diciembre, habrá de ser otro el cantar en la tierra del tango y la milonga. ¿Será acaso Milei, la nueva ley argentina?

*Fuentes: Diálogos con intelectuales, jóvenes y adultos mayores que sufren el rigor de la actual situación socio-económica que atraviesa Argentina y diversos sitios web.

El autor de esta crónica política con visiones diversas del momento actual argentino: José Orellano, director de El Muelle Caribe, de vacaciones en Buenos Aires.