“Una casa en mi país”

“Una casa en mi país”

Cada año, colombianos en el exterior —desde Estados Unidos, España, Australia y otro países— realizan 36 mil búsquedas en internet relacionadas con la compra de vivienda en su país de origen. Adquirirla, una excelente inversión.

Devaluación ante dólar y euro
facilita la compra de vivienda
a colombianos en el exterior

Por Cubículo de Redacción

Todo parece indicar que la devaluación del peso colombiano frente a monedas como el dólar y el euro generan oportunidades de compra de vivienda para colombianos residentes en Florida, Estados Unidos, en España y en Australia.

De acuerdo con una investigación del área de mercadeo y ventas de Cusezar, el 67 por ciento de las búsquedas en internet proviene de Florida y un 13 por ciento de España.

Al respecto, Cusezar informa que en los últimos 5 años —de 2018 a 2023— ha vendido 350 viviendas, especialmente a residentes en Estados Unidos, España y Australia. Durante 2022, fueron 18 los compradores. Cifras que indican que ha aumentado el interés de compra desde el exterior. Es como si dijeran: «Soy migrante, pero quiero mi casa en mi país, Colombia».


Adriana Montenegro, gerente comercial y de mercadeo
de Cusezar.

«Definitivamente, adquirir vivienda siempre será una inversión para la vida, ya sea para personas que se encuentran en el país o fuera de él», dice la gerente comercial y de mercadeo de Cusezar Adriana Montenegro.

De acuerdo con Cusezar, la compra de vivienda desde el exterior hace que el sector de la
construcción también sea uno de los que más aporta y dinamiza la economía del país.

«Los residentes en el exterior pueden invertir en viviendas para arriendo o alquiler y de esa forma recibir una renta mensual, con incremento de ingresos año a año, de acuerdo con lo estipulado por la ley. Y en caso de querer retornar al país, pueden encontrar un inmueble valorizado, contribuyendo así a su capitalización o a plan de retiro», agregó la ejecutiva.

El ciudadano colombiano Jaime Benítez, quien emigró hace más de 30 años a La Florida, tuvo siempre el propósito de comprar vivienda en Colombia y fue así como decidió junto con su familia invertir en la ciudad de Cali. “Compré vivienda hace 5 años para poder disfrutarla en Colombia, considero que es un trámite fácil, todo lo hicimos estando fuera. Casi siempre, quienes estamos lejos. tenemos en mente regresar en tiempos de jubilación, ese fue mi caso. Considero que para quienes estamos viviendo entre dos países es muy buena inversión, es muy favorable el cambio de moneda en este momento».

Entre las zonas en Bogotá por las que más se interesan las personas que residen en otros países están Salitre, Chapinero, La Calera y Colina Campestre, áreas en las cuales se fusiona lo comercial con lo residencial, cerca del Aeropuerto y la Terminal de transportes, en el caso de Salitre, y universidades por Chapinero. En Cali, por el oeste y el sur de la ciudad.

«Colombia cuenta con destinos atractivos para comprar vivienda gracias a su potencial turístico, su diversidad gastronómica y la calidez de la gente», agrega la ejecutiva de Cusezar.

La inversión de vivienda desde el exterior también se da a través de las remesas internacionales, precisamente por la facilidad que permite el cambio de moneda. Según el Banco Mundial, las remesas enviadas a países de ingreso mediano-bajo alcanzaron los 605.000 millones de dólares en 2021 y hubo un crecimiento de más del 8 por ciento con respecto a 2020.

«La compra de vivienda desde el exterior hace también que el sector de la construcción sea uno de los que más aporta y dinamiza la economía del país», sostiene Montenegro. «Tan solo en 2021, según el Banco Mundial, a Colombia ingresaron en materia de remesas, cerca de 8.600 millones de dólares, en su mayoría provenientes de Estados Unidos y España, países que coinciden con las búsquedas de compra de vivienda en Colombia”, agrega l gerente general de Cusezar Susana Peláez. La estrategia de internacionalización de la compañía, además de facilitar los trámites de compra, cuenta con recursos de remesas como aval para el financiamiento, ya que las personas receptoras de este dinero y quienes lo envían pueden generar movimientos financieros que facilitan la aprobación de un crédito de vivienda