Vereda Playa Blanca-paradisíaca isla de Barú y… Noticia por algunos abusos contra viajeros, pero también blanco fake news… Tiene un Consejo Comunitario… ¡dispuesto a rescatar el sitio del maltrato!
Esta es la sentida apuesta de un Consejo
Comunitario para ‘vereda paraíso’ de Barú
Por José Orellano
Más allá del éxito o el fracaso que ha representado el número de visitantes —muchísimos o poquísimos— a un destino turístico, hoy crece la conciencia positiva a favor de sitios a los cuales el turismo masivo ha maltratado, y considerablemente.
Desde siempre, se ha visto a ese visitante —nacional o extranjero— como el fundamento del turismo desde la vera del negocio, el que genera full divisas, pero… ¿desde qué perspectiva se ha mirado hacia el destino turístico explotado, hacia su entorno y sus habitantes? Ese destino turístico dañado, degenerado por el uso y el abuso del turista.
Toma fuerza entonces, y desde hace algún rato, el denominado turismo regenerativo, opción de mejorar lo degenerado.
Pero… técnicamente, ¿qué es el turismo regenerativo?
‘Monte Holiday Ecoturismo’ lo define como “el turismo que trata de evitar el impacto negativo en los destinos, a la vez que pretende mejorar y regenerar los recursos locales, así como contribuir a la distribución justa de los ingresos locales”.
Es ese turismo que “intenta mejorar el estado natural de una zona, dejarla mejor de cómo la encontramos”. El que también propone diseñar experiencias que acompañen el ritmo de la naturaleza y la cultura del lugar.
Un colectivo llamado Consejo Comunitario de la vereda de Playa Blanca, jurisdicción de la isla de Barú, en Cartagena-Bolívar, que se asocia con la novel agencia de viajes Baru Ancestral Travel y tiene entre sus miembros a representantes de los trabajadores y hasta de pescadores del territorio, mantuvo su dinámica Caribe —sabor a mar y playa— y con un loable propósito, durante la reciente Vitrina Turística de Anato.
Respondiendo a los nombres de Yoiser Romero Galán, Nelsy Marimón González, María del Carmen García, Dianis Vanessa Ortega Paternina, Heidi Marimón González y Yenifer Lorena Bauzán Paternina, empoderamiento femenino, un hombre entre cinco mujeres, los seis trabajando por el rescate y la preservación de Playa Blanca. Andan encarretados con el turismo regenerativo a favor de su maltratado terruño.
Ante el reportero, asume la vocería Nelsy Marimón, quien, de abreboca, dice. “Gracias a usted por este espacio…”.
—¿Cómo y por qué están aquí?
—El año pasado participamos en la Vitrina como Consejo Comunitario y mostramos la parte comunidad que la gente desconoce —dice Nelsy para comenzar—… Este año, por iniciativa propia, tomamos la decisión de crear un operador turístico y a través de ese operador turístico poder mirar cómo encontramos la posibilidad de mejorar la parte de la economía local de nuestra comunidad. Y estamos aquí para promocionar nuestras iniciativas.
De acuerdo con Nelsy, el turismo que por decenios se ha practicado en Playa Blanca no respeta las comunidades étnicas que se encuentran en el territorio.
—Al ver que hay una transgresión ambiental en el entorno —dice—, hemos venido trabajando de manera social y cultural por mantener nuestra identidad y preservar y conservar el territorio de la isla de Barú, de la cual hace parte la vereda de Playa Blanca.
Y precisa Nelsy que una apuesta del colectivo en este 2024 es poner en práctica productiva el turismo regenerativo que, incluso, vaya mucho más allá de la sostenibilidad de Playa Blanca.
—Confiamos y creemos en que, si nosotros tenemos un propósito claro de lo que puede ser el turismo cultural, natural, las cosas pueden resultar mejor en Playa Blanca.
La mujer habla sin titubeos, convencida de que ese turismo regenerativo los va ayudar a poder mejorar la economía local al integrar un sistema desarrollador en el territorio y promoverlo de acuerdo con su identidad ancestral.
—Obviamente, vamos a poder manejar lo que es la parte ambiental, la cultural y la producción de lo que queremos, porque lo que deseamos es que Playa Blanca no sea solo un turismo de sol y playa, puesto que también tiene una cultura y una identidad. Deseamos crear propósitos mediante los cuales valoremos lo que tenemos con la disposición de idear una propuesta de valor hacia la gente que nos visita.
Nelsy Marimón González es genuina lideresa. Al tiempo que ella expone su discurso, sus compañeras y su compañero de aventura asienten con la cabeza.
—También tenemos la intención —continúa Nelsy— de reconocer a las personas que van a vivir la experiencia en Playa Blanca y a quienes las llevan (operadores), porque es importante que esto se haga en conjunto… Playa Blanca es un paraíso al cual visita gente de todo el mundo y a esa gente la queremos como actores amplios, dispuestos a unirse a nuestros afanes, que se unan a los objetivos del Consejo Comunitario y participen de un turismo de cuidado ambiental en esa zona.
—¿Además de mar, playa, comida y licores que más va a encontrar quien visite a Playa Blanca desde la oferta de un turismo regenerativo?
—Vamos a ofrecer un turismo de naturaleza que en Playa Blanca no existe, pero tenemos algunas dificultades ambientales que hay que mejorarlas y trabajamos en ello.
—Pero si en Playa Blanca no existe turismo de naturaleza, usted lo ha dicho… ¿Cómo ofrecerlo?
—Vivimos nuestro territorio y sabemos que ahí lo tenemos inexplotado… Lo que vamos a hacer es mejorarlo, adaptarlo a lo que hoy tenemos. Por ejemplo: nosotros queremos rescatar y resaltar la gastronomía ancestral, tenemos el lugar donde el viajero va a vivir la experiencia de llegar hasta allí y poder disfrutar de un plato típico hecho con productos del territorio, manos de mujeres nativas, con un sabor isleño, un sabor original.
—Nelsy: solo para qué la gente sepa, dígame ¿cómo es ese sitio? Descríbamelo…
—Es un sitio amplio, ameno, lleno de calor humano… Y sobre todo de importancia y valor para quien llega allí, porque va llegar a aprender, va a saber, por ejemplo, cómo se prepara un arroz de coco, cómo se prepara la proteína, el pescado, los mariscos. Y hasta podrá luego degustar lo que él mismo prepare.
—Mar playa, sol, vegetación, aves…
—Tenemos aves nativas, tenemos corales y también tenemos vegetación… Estamos trabajando para buscar la forma de implementar —aparte de que la gente vaya a disfrutar la playa— la oferta de una medicina ancestral, partiendo del solo hecho de que la playa, para nosotros, es medicina…
—¿Medicina ancestral? ¿Menjurjes naturistas?
—Aparte de la playa como medicina, también los manglares. El mangle es el pulmón del mundo y, por lo tanto, pulmón del territorio. Y pulmón de los humanos.
—¿Avistamiento de aves? ¿Otro recurso turístico en Playa Blanca?
—El avistamiento de aves puede ser un recurso turístico para explotar y, para que lo sempa: estamos tomando impulso para crear el primer mariposario en la isla de Barú.
—¿A nivel de gobierno, con que respaldo cuentan?
—El Estado ha estado un poco de espalda a nuestro territorio, pero hoy día confiamos en que, con la nueva administración de Cartagena, de Bolívar y de la Nación mediante su propósito de un cambio para la vida, vamos a lograr lo que queremos para nuestro territorio: turismo regenerativo, comunitario, sostenible y que realmente se valore al nativo ancestral.
¿Han hecho las diligencias?
—Hemos estado en conversaciones con el señor alcalde Dumek Turbay, él nos ha abierto puertas, estamos en ese proceso de diálogo y mirando cómo podemos implementar nuestras ideas.
—Ando en plan de turismo de aventura y necesito su guía, Elsy, para conocer su territorio… Llego a Cartagena y ¿cómo me voy hasta Playa Blanca?
—Si estás en Cartagena puedes llegar vía terrestre en 45 minutos en un transporte seguro… Y si te vas al muelle de ‘La bodeguita’ haces un paseo en yate hasta Playa Blanca…
—Dime: ¿Y dónde queda, ¿La bodeguita’?
—En el centro amurallado de ‘La heorica’.
«El turismo regenerativo es un turismo que tiene un impacto positivo», nos respondió la vicepresidenta senior del Consejo Mundial de Viajes y Turismo-WTTC Virginia Messina cuando le comentamos sobre los afanes de la representación de la vereda Playa Blanca en la feria.
«Cuando ese turismo se da, las cosas se mantienen y en eso es en lo que tenemos que trabajar», agregó. «Por muchos años hemos analizado el impacto positivo por el lado económico, pero ahora ¿cómo podemos obtener ese impacto positivo a favor del medio ambiente y de nuestras comunidades, que son esenciales para este tipo de turismo? Buscándolo».
Trabajando —decimos nosotros ahora—: siguiendo el ejemplo del Consejo Comunitario que preside Yoiser Romero Galán y que tiene a Nelsy Marimón González como la representante legítima. Y a María del Carmen García como tesorera y representante “de todos los trabajadores de Playa Blanca”, a Dianis Vanessa Ortega Paternina como secretaria, a Heidi Marimón González como activista y a Yenifer Lorena Bauzan Paternina también como activista desde su condición de secretaria de la asociación de pescadores de Playa Blanca-Isla de Barú.
Todos, integrantes también de la agencia de viajes Barú Ancestral Travel.
También trabajan contra la mala imagen que las fake news le está propiciando a ese paraíso a raíz de ciertos abusos —reales— contra turistas cometidos por comerciantes inescrupulosos cuya acción no identifica el ancestral comportamiento, buena gente, de la vereda-balneario.
Fuentes complementarias: https://www.paxadvising.com/turismo-regenerativo-razones-por-las-que-deberias-aplicarlo/ – https://monteholiday.com/que-es-el-turismo-regenerativo/ – https://www.tripadvisor.co/