Arte en el fútbol

Arte en el fútbol

El último día de FILBo/36/2024, 2 de mayo, se presentó el libro ‘Pelé y Maradona: el fútbol arte’ de Jaime de la Hoz Simanca. Nota de Inocencio De la Cruz.

PRESENTACIÓN EN FILBO

‘Pelé y Maradona: el futbol arte’…
el brasileño, ‘O rey’ para siempre

Por Inocencio De la Cruz

Imagen de portada: en el estrado de presentaciones de la sala Jorge Isaac de Corferias, acondicionada para la ocasión, Jaime De la Hoz Simanca y Tatiana Paola Escarraga cuando charlaba sobre el libro ‘Pelé y Maradona: el fútbol arte’, al cual se le busca mercado extranjero.

Mercados en Brasil y Argentina para el libro ‘Pelé y Maradona: el futbol arte’, busca su autor el periodista y escritor Caribe Jaime De la Hoz Simanca.

La obra fue presentada en acto cumplido el último día de la feria internacional del libro de Bogotá-Filbo/2024, que cerró sus puertas el jueves 2 de mayo.

En desarrollo de un animado diálogo de De la Hoz Simanca con la periodista Tatiana Paola Escárraga —investigadora de ‘Casa Macondo’— y el cual tuvo lugar en la sala Jorge Isaac de Corferias, había que llegar a la conclusión de que un partido de fútbol es una puesta en escena.

Las respuestas a las preguntas de Tatiana Paola hicieron saber a los asistentes al acto que De la Hoz Simanca ve arte en todas esas cosas mágicas que surgen en medio de la práctica del denominado “deporte de las multitudes”: la danza que brota de los driblings por parte de quienes los ejecutan y quienes se esfuerzan en evitarlos, la plasticidad en las estiradas de los arqueros, una chilena, la belleza de la concepción de muchos goles, las celebraciones.

Y arte es lo que le regalaron al mundo Pelé y Maradona, cada uno de ellos en su estilo propio e inimitable y en épocas diferentes: Pelé, llevando su arte al clímax con muchos previos antológicos para el logro de su goles, en especial sus saltos como en levitación y por escalones imaginados para coronar los de cabeza; y Maradona con su endiablado dribling, como si hubiera llevado el balón atado a sus tacos, que el máximo ejemplo de tal virtud se circunscribe a su segundo gol en cuartos de final Argentina-Inglaterra en el mundial de México/1986: para llegar a la gloria —‘El gol del siglo’—, había driblado a siete jugadores. “Los había dejado fritos”… Y difunto al portero.

Para el uno y para el otro, México teatro de ensueño, porque en 1970 Pelé condujo a Brasil a su tercer título mundial, clave, gracias a sus goles, a su liderazgo y a la primera anotación de los 4 con que derrotó a Italia para alcanzar la corona. Para Maradona, escenario de su famoso gol, que allí mismo había hecho la trampa: el gol con la mano.

‘Pelé y Maradona: el futbol arte’, los dos, reyes en sus respectivos momentos, pero el brasileño: ¡‘O rey’ para siempre!, ¡El #1 para siempre!, tanto en la cancha como fuera de ella… Maradona, el genio en el campo, pero hombre de mil defectos fuera de él.

Jaime y Tatiana Paola: un diálogo enriquecedor.

En esa presentación de libro —que es editado por SantaBárbara, de Alfonso Ávila— se supo que De la Hoz Simanca es un apasionado por la literatura desde mucho antes de que irrumpiera en el periodismo deportivo bajo las orientaciones de Fabio Poveda Márquez en El Heraldo Deportivo de Barranquilla y que, a través de su carrera de algo más de tres decenios, ha sido un practicante profesional del periodismo literario en géneros como la crónica, el reportaje y la entrevista.

“Una hora no basta” había de decir alguien cuando terminaba el tiempo adjudicado a la presentación en Filbo de ‘Pelé y Maradona: el futbol arte’ en la sala Jorge Isaac, lapso durante el cual se recordó la novela ‘A sangre fría’ de Truman Capote como el más claro ejemplo de la simbiosis literatura-periodismo para recrear narrativa, contexto en el cual también se mencionaron los nombres de Norman Mailer y Gabriel García Márquez y el concepto del Nobel cataqueño de que “el reportaje es el cuento completo”.

Por entre las palabras de entrevistadora y entrevistado, desfilaron el uruguayo Eduardo Galeano —su libro, ‘El fútbol a sol y sombra’, y en el cual describe la habilidad de Pelé y Maradona como algo que desafiaba las leyes de lo común y sugiere para los dos una cualidad casi mágica o sobrenatural en su juego—; Roberto Fontanarrosa y su cuento corto ‘Viejo con árbol’ —en un estilo simple pero profundo—; una de las 400 entregas de la columna ‘La jirafa’ por Séptimus en El Heraldo de Barranquilla y en la cual Gabriel García Márquez, que no gustaba del fútbol, escribió sobre fútbol, pero desde un tono mamagallístico, mofándose tanto de la práctica de este deporte como de los amigos que lo llevaron a ver un partido en el Romelio Martínez de Barranquilla, y también desfiló Borges con su “odio al fútbol” y aquella anécdota tras el título alcanzado por Argentina en el Mundial Argentina/1978. Borges tropezó con el director técnico campeón Jorge Luis Menotti y le inquirió —con la ironía a toda prueba— sobre lo famoso que debía ser a nivel mundial dado que su mucama, la de Borges, le había solicitado un autógrafo personalizado para ella…

A esa procesión de nombres había que sumar el del periodista deportivo argentino José Luis Clerc, quien escribió el libro ‘La caída de un ídolo’ y en el cual narra la vida y la carrera de Diego Maradona, centrado el autor en los problemas personales y los escándalos del ídolo fuera del campo, así como en su declive definitivo después de su retiro del fútbol profesional.

En el transcurso del diálogo se habló de aquel niño de 7 – 8 años que en Lanus, su cuna, su terruño, maravillaba con sus jugadas futbolísticas al extremo de que algún buscador de talentos, cuando lo invitaron a que lo viera en acción, creyó que trataban de engañarlo con un enano.

También se tocaron temas como la llegada del ‘D10S’ al Napoli de Italia, ‘La camorra’ y la financiación de su contratación, los inicios de Maradona en el submundo de la cocaína y su caída final…

La portada del libro.

Como es de suponer, había que hablar del ‘Maracanazo’, aquel ‘insuceso’ en el Mundial de 1950: la caída 2-1 de Brasil ante Uruguay en el Maracaná ante 200 mil aficionados, la debacle, la andanada de suicidios que siguió a la caída del archifavorito y el dolor inmenso, muy campesino, de ‘Diondinho’, el papá de Pelé, ese Edson Arantes do Nascimento, que, a sus 8 años y solo para consolar a su padre dijo —en un simple decir que había de hacerse realidad ocho años después—, que “Yo le daré un título a Brasil”. Y no sería uno solo, serían tres. Su decir había de resultar premonitorio.

Precisamente con funcionarios de Brasil —que fue el país invitado de honor a Filbo/24— ya habló Jaime De la Hoz Simanca, avanzando en su proyecto de abrirle mercado internacional a ‘Pelé y Maradona: el futbol arte’ en el país de Jorge Amado.