Se ha cumplido en San Juan Del Cesar un homenaje a la memoria del compositor-Hernando Marín. Sus colegas Roberto Calderón y Rafael Manjarrez recuerdan características del hijo de El Tablazo.
HOMENAJE
Hernando Marín: «De esos hombres de
“fuerte temperamento, ingeniosos, con
capacidad de lucha… ¡Gladiadores!»
Sayco hizo entrega de la Orden Santa Cecilia post morten al compositor fallecido hace 25 años
Por Inocencio De la Cruz
Hombre de «fuerte temperamento cuando se necesitaba ser fuerte», de esa casta de «hombres ingeniosos, hombres con capacidad de lucha, gladiadores de la vida», ese era Hernando José Marín Lacouture.
Así recordaron al compositor nacido en El Tablazo los también compositores Roberto Calderón y Rafael Manjarrez.
Apreciaciones que fueron expuestas durante los diversos actos cumplidos este jueves 5 de septiembre de 2024 en San Juan del Cesar-La Guajira, cuando se recordaron los 25 años del fallecimiento del compositor de más de 200 exitosas canciones.
«Hernando Marín tuvo las virtudes que no tiene cualquier ser humano. Era un hombre de fuerte temperamento, cuando se necesitaba ser fuerte. Por eso, algún día dijo: “¡Yo soy el gavilán mayor!», rememoró Roberto Calderón, tras evocar el día en que se conocieron en El Tablazo, una vez Marín concluyó una jornada agrícola conduciendo un tractor. Desde entonces se hicieron los mejores amigos, hasta el punto de que terminaron siendo compadres. «Fue mi mejor amigo, mi mejor mentor, mi mejor compadre».
La forma de ser de Marín la complementó Rafael Manjarrez precisando que «para decir buenos días, Nando hacía una canción». Contextualizó tal decir, al manifestar que la música vallenata perdió muchísimo con el fallecimiento de Marín Lacouture, “porque estaba en pleno momento, estaba en el momentico en que para decir buenos días, hacía una canción”.
Para el presidente de la Sociedad de Autores y Compositores de Colombia-Sayco, este 5 de septiembre, allí en San Juan, no debía hablarse de conmemoración sino de recuerdo… «El recuerdo de los 25 años de la partida de Nando».
Manjarrez anotó que tanto en la ofrenda floral —acto simbólico cumplido en el cementerio— como en la misa y los actos protocolarios, entre estos la entrega de reconocimientos en el Museo del Compositor y la Casa de la Cultura Municipal, pudo observar el cariño vigente entre los amigos del autor de ‘La creciente’, sus colegas y el pueblo mismo.
«Eso es evidencia de lo que él sembró en vida», dijo Manjarrez y agregó: «Veo los rostros de los ‘hernandomarinistas’ y bien: la tristeza toca porque corresponde a una partida, pero hay que recordar los momentos buenos de él, los momentos en que se llevaba el mundo por los pechos con su talento».
El sentimiento manjarreciano era expresado ante los micrófonos y las grabadoras del nutrido grupo de periodistas —especialmente originarios de Valledupar— que asistió al homenaje.
«Nando era un hombre de avanzada, un hombre para agarrarlo con las dos manos donde lo quisieran poner. Yo lo vi enfrentar circunstancias donde se ponía a prueba aquel coraje de guapo de la región», siguió diciendo Manjarrez. «Este es un momento para llevarlo en la memoria y para que nos mantenga vivo el recuerdo de un hombre grande de nuestra Guajira, de nuestra Colombia».
El abogado y notario aprovecho la ocasión para resaltar y para agradecer la labor encomiable, «de mucha capacidad, de mi primo Roberto Calderón en este museo, en donde se observa que se hizo un trabajo con cariño, de categoría, con estilo, con distinción. Me consta que eran compadres muy queridos y a Sayco nos corresponde agradecerle. Qué bonito gesto».
En una sala especial del Museo del Compositor se exhiben algunos artículos que pertenecieron a Hernando Marín, así como fotografías y videos alusivos al homenajeado. Una recopilación de detalles, hecha por Calderón.
Finalmente, Manjarrez se refirió a la actividad artística que lo identifica con Calderón y con Hernando Marín y señaló: «Los compositores tenemos la suerte de que el recorrido de nuestras vidas queda testimoniado. De manera que una persona en el Tolima, sin conocer a Hernando Marín, solo con escuchar sus canciones, sabe qué tipo de hombre era. Por lo tanto, los invitamos a que sigan ese patrón de conducta, hombres ingeniosos, hombres con capacidad de lucha, gladiadores de la vida».
Pero, además, Rafael Manjarrez había dicho que «para nosotros era un paradigma y una escuela, hoy nos corresponde recordarlo y mantener su memoria viva con la tristeza de que no está».
Y tras la imposición de la Orden Santa Cecilia, máxima distinción que otorga Sayco a sus agremiados —póstuma, en esta oportunidad— Manjarrez dijo que Hernando Marín era uno de los autores emblemáticos de Sayco. «Seguimos con el compromiso y legado institucional de Sayco, cual es proteger sus obras, al igual que para los vigentes y los que ya han partido».
Manjarrez admitió que un 40 por ciento de la obra y el estilo de la propuesta poética y de la construcción armónica y musical de Nando Marín está presente en sus composiciones. «Se lo decía a él y era la forma de agradecerle. Mas no solo ocurre conmigo, sino con la mayoría de los compositores de vallenatos del Caribe colombiano».
Déimer Jacinto Marín Jiménez, Ana Cecilia Marín Fuentes, María Eugenia Marín Fuentes, Hernando José Marín Urbina, Sara Isela Marín Urbina, Anne Marín González, Juan Pablo Marín Álvarez, Ana Linys Marín Álvarez, Anacelis Marín Corrales y Ana Tatiana Marín Corrales son los hijos y las hijas del compositor y varios de ellos y ellas siguen el legado de su padre. Estuvieron presentes en el homenaje y algunos(as) expusieron sus aptitudes artísticas.
El compositor Sergio Moya y el cantante Silvio Brito —interprete de canciones del ‘Eterno trovador’—, el alcalde de San Juan Enrique Urbina, amigos, allegados, admiradores, diputados y concejales se unieron a la efeméride y asistieron a los diversos actos de recordación.